Todos tenemos una realidad mágica en nuestra existencia

Un antiguo proverbio zen dice: «Cuando el alumno esté preparado aparecerá el maestro» . Cuando estemos realmente decididos en nuestra mente a experimentar la realidad mágica y a vivir todos y cada uno de nuestros días con un propósito, se nos mostrará el modo de lograrlo. Examinemos las cuatro palabras clave de este proverbio zen: ALUMNO: Sé un alumno. Permanece abierto y dispuesto a aprender de todos y cada uno. Ser alumno significa tener espacio interior para un nuevo saber. Cuando estás verde creces y cuando estás maduro te pudres. Permaneciendo verde, evitarás la maldición que representa ser un experto. Cuando sepas de corazón que cada persona que encuentras en la vida tiene algo que enseñarte, podrás aprovechar al máximo lo que ésta te ofrezca. La capacidad de crear realidad mágica supone en primer lugar el ser un alumno de la vida. PREPARADO: Sé un alumno dispuesto. Tu nivel de preparación para crecer y convertirte en tu propio hacedor de mil...