EL INTESTINO: Nuestro segundo cerebro

«Tener un nudo en el estómago o mariposas en el estómago», «hacerse mala sangre o calentarse la cabeza», «Revolverse el estómago»… Mucho antes de que la realidad científica les diera la razón, las expresiones populares reflejaban la estrecha relación entre el vientre y las emociones… ¿Existe un vínculo estrecho entre el intestino y el cerebro? Actualmente, sabemos que hay 200 millones de neuronas en el intestino y que este sistema nervioso entérico se comunica de manera estrecha con el sistema nervioso central. Más recientemente, los estudios han sugerido que, además de sus funciones metabólicas e inmunitarias, la microbiota intestinal también participaría en la comunicación entre el intestino y el cerebro, e influiría sobre el funcionamiento cerebral. En la actualidad, los investigadores estudian las posibles relaciones entre un desequilibrio de la microbiota intestinal y algunos trastornos psíquicos: estrés, depresión, pero también enfermedades neurodegenerativas (Parkins...